Pero la historia de Castalla todavía guarda algún episodio bélico más, como dos batallas contra el ejército francés de Napoleón, hechos que aún mantiene vivos la memoria colectiva de Castalla.
Además, esta población está íntimamente ligada a la cultura, sobre todo gracias a la figura del gran escritor Enric Valor.
Los amantes de la naturaleza también pueden encontrar en Castalla su destino ideal. No muy lejos se alza el Xorret de Catí, altura muy conocida por los ciclistas de carretera por su reiterada presencia en la Vuelta a España. También es posible realizar otras actividades como el senderismo o la escalada.
Y si hay ejercicio físico, no hay que dejar de lado la comida. Es casi obligatorio probar el gazpacho de Castalla (realizado con tortas ácimas desmigadas, setas, caracoles, carnes de pollo y conejo, tomate y cebolla sofritos, que se vierten sobre una torta de levadura cocida). Un plato tradicional que los habitantes de la zona han sabido conservar para el disfrute de cuantos quieran probarlo houy en día.